La película
“Chacal” (1973) es la versión cinematográfica de la novela del mismo título
escrita por Frederick Forsyth. Dirigida por Fred Zinnemann, relata la historia
de un complot para matar al General de Gaulle, presidente de Francia.
No considero que sea un film genial,
pero sí mantiene el interés de principio a fin, resulta muy entretenida y,
sobre todo, se ven los escenarios naturales donde se desarrolla la acción, algo
que en la novela es imposible salvo que se conozca el lugar.
Fui a verla al Cine Palacio de la
Música en plena Gran Vía madrileña.
Sin embargo, no
teniéndola como genial ¿por qué la reseño? Pues, porque no estuve solo. Estuve
con una chica, Laura, hermana de una compañera de colegio de la mía, a la que
aquella tarde del 12-01-1974 pedí relaciones -como se decía entonces- Podéis
imaginaros, no hice más que mirarla durante la proyección. No me respondió en
ese momento; sí al cabo de varias jornadas y lo hizo afirmativamente.
Dentro de poco, celebraremos el 34º
aniversario de boda.
Rafael Gª-Fojeda
Enhorabuena, Rafael. Por el aniversario y porque Chacal fuese un buen 'catalizador', muy bien elegido.
ResponderEliminarSi es que el cine entonces era catalizador de muchas "reacciones en cadena".
ResponderEliminarMuchos abrazos, Rafael y enhorabuena a los dos. Transmite mis saludos a Laura.
Muy bien hecho Rafael. Me alegro mucho de que sigáis juntos.
ResponderEliminar34 años es un montón de años, los próximos que mi mujer y yo hagamos serán los 39 y tan felices. FELICIDADES
ResponderEliminarAprovechando esta circunstancia surge otro tema de conversación. La duración de los matrimonios antes y ahora y las razones sociológicas.
Creo que estamos en una buena posición para debatir, los hijos ya mayores y con circunstancias diferentes a las nuestras. Etc.,Etc. Etc.
El "Chacal" que he visto es el de Bruce Willis (actor) y sient no recordar el de Zimmerman que es un buen director (Romeo y Julieta). La novela de Forsith si la he leido y me gusto como todas las que he pillado de ese autor.
Los matrimonios de antes duraban muchísimo, si no toda la vida, por multitud de causas, siendo la principal el sometimiento de la esposa inculta e incapaz de ganarse la vida al tipo que, diciendo amarla, en buena parte de los casos se limitaba a explotarla. Desde que las mujeres conquistaron su independencia y su capacidad de hacer con sus vidas lo que les diera la gana los matrimonios han ido evolucionando a meros contratos de protección familiar mientras los cachorros no sean grandes, para terminar en divorcios a menudo traumáticos donde a los idiotas caballeros se les saca hasta el hígado. El matrimonio, como institución, sólo tenía sentido mientras existiera el sometimiento de la hembra al macho. Al haber acabado con eso las mujeres ya no tienen necesidad alguna de aguantarnos, y en consecuencia no lo hacen. Gracias a eso el mundo es ahora mucho más respirable, las mujeres mucho más atractivas y los caballeros que no han sabido ponerse al día están mucho más xodidos.
EliminarNo se si se ha publicado el comentario anterior.
ResponderEliminarHablaba de que 34 son un montón y te lo digo yo que los próximos será 39.
Decía también que la duración de los matrimonios, de antes y de ahora, es otro tema de débate y exposición de ideas y opiniones. Muchos tenemos hijos en edades comprometidas con el tema y con circunstancias diferentes a las nuestras.
Finalmente mencionaba que el "Chacal" que yo he visto es el de Bruce Willis (actor) y que me perdí el de Zimmerman que es un buen director (ver Romeo y Julieta). Si he leido la novela de F.Forsith y me gusto. Me han gustado todas sus novelas que he pillado.
Un abrazo y FELICIDADES Rafa.
¡¡Si se había publicado ¡¡. Perdón
ResponderEliminarRafa. Enhorabuena por esta entrada.
ResponderEliminarPara no entrar en polémicas, pongo aquí unas declaraciones que me parecen, respetables, nada dogmáticas y que muestran lo que pienso sobre el tema que se intenta debatir aquí y que no voy a entrar al trapo.
Paul Johnson, ENSAYISTA y periodista, inglés. Editor durante seis años de The New Sattesman. Entre sus polémicos libros de mayor éxito se cuentan: Tiempos modernos; La historia del cristianismo; y Los intelectuales.
Se pregunta cómo ha hecho durar su matrimonio y responde:
Todo el empuje de nuestro ambiente cultural insiste en que el amor es fácil y espontáneo, e incita a los millones de jóvenes que se envían felicitaciones el día de San Valentín a creer que también el matrimonio debe de ser fácil y natural. Nada más lejos de la realidad. El amor y el matrimonio son cosas muy diferentes. El amor es un afecto. El matrimonio es una profesión, la única para la que no existe preparación ni se exigen más aptitudes que la edad y estar soltero. Eso significa que requiere más esfuerzo. Altercados, diferencias de opinión, discusiones, riñas, ataques de ira, enfados y silencios forman parte de la realidad diaria del matrimonio. Es normal que dos personas que viven juntas tengan a menudo puntos de vista diferentes; saber resolver esas diferencias cediendo y con sencillez es parte de la dinámica vital y del proceso de maduración de una persona.
¿Qué sentido tiene el divorcio?
Divorciarse significa interrumpir ese proceso de crecimiento, arrancar de raíz la planta viva y arrojarla, sin necesidad, al fuego. Mi esposa Marigold y yo llevamos casados casi cuatro décadas. Los dos tenemos un carácter fuerte y somos de opiniones firmes, y hemos tenido nuestras diferencias, algunas serias. De hecho, si hubiéramos decidido dejar de trabajar en nuestro matrimonio, podríamos habernos divorciado más de una docena de veces. Pero hace mucho que se ha difuminado el recuerdo de los motivos, las circunstancias y los detalles de nuestras discusiones. "Cariño, ¿por qué estuvimos a punto de divorciarnos en 1972?". "No me acuerdo. Pero no fue en 1972, sino en 1974". "¿Estás segura?".
¿Qué aconsejaría a quienes son conscientes del deber de "trabajar" por la estabilidad del propio matrimonio?
Los matrimonios duraderos se edifican sobre los estratos arqueológicos de riñas olvidadas. Sobre toda pareja que se acerca a sus bodas de oro flota el saludable espíritu del olvido. Como es lógico, las felicitaciones por San Valentín hablan sobre todo de amor ardiente, y los sacerdotes y párrocos, de fidelidad; pero los esposos viejos saben que los secretos de un matrimonio bien trabajado son paciencia y perseverancia, tolerancia y dominio de sí, estoicismo, tenacidad, resistencia, disposición a perdonar y, a falta de todo eso, mala memoria. También ayuda, por supuesto, que el marido esté siempre dispuesto a cargar con la culpa. Como debe ser.
Mi primera Peli en pareja, fue Oliver.
ResponderEliminarNo recuerdo mucho de la peli. Nos pusimos en la última fila, llamada entonces de los mancos, a hacer manitas. Y eso dura ya, a ver, 39 años...
La mías (era programa doble) fueron 'La Máscara Submarina' y 'La Hora Final', en el Chueca (si no había mucha gente pasaba gratis, porque mi tío Ignacio era el portero). La primera era de mucho miedo (para la época; hoy daría risa). La otra era más agradable, del fin del mundo por una guerra nuclear, o algo así. Los dos teníamos quince recién cumplidos, y me temo que con todas las hormonas en su sitio, sin dejar una. Por entonces éramos grandes amigos, y aún hoy lo seguimos siendo. Ella fue la primera responsable (luego hubo más) de una de mis más firmes conviciones: la verdadera y auténtica amistad se da entre hombres y mujeres; entre sólo tíos, o sólo tías -salvo excepciones específicas-, es siempre incompleta. Años después se casó con un capullo (mi mujer, que también la quería mucho, y yo, fuimos testigos en su boda), del cual se divorció felizmente cuando Paco Fernández Ordóñez decretó que ya no era pecado. Desde entonces tuvo un buen número de parejas, con muchas de las cuales compartimos mesa y mantel (siempre ha cocinado de maravilla). Sus ánimos fueron de los primeros que recibí cuando murió mi primera mujer, y pienso que ella agradeció los míos cuando su hija mayor acabó de oblata (hoy está curada, por fortuna). Los dos sobrellevamos la vejez de un modo bastante razonable, al punto que alguna vez nos acordamos, entre risas, de aquel maravilloso programa doble.
EliminarAlfonso el Nostálgico
Hemos terminado comentando casi únicamente el último párrafo de Rafael...... Y yo creo que este tema dará para mucho más. ¿alguien se anima a ponerlo en la página principal?
ResponderEliminarYo voy para 42 años.....¡y con la misma!... Eres un "conservador" Paco.... La misma esposa, trabajé en una única empresa, los coches me duran 10 años, ... y ¡ahora he redescubierto a los compañeros de antaño.....!
Pues eres un rato original declarándote delante de un "chacal"; no es precisamente la peli más adecuada, ya que es una de las pocas que no es nada romántica (y eso que la recuerdo bien y está muy correctamente llevada)
ResponderEliminarComo muchas cosas en esta vida, ser capaz de mantener una unión estable más de unos, por ejemplo, 15 años, ya es un logro, y tú has llegado a doblarlo. Y yo, con mis 38, también tengo alguna experiencia...
Cuando ya se ha rebasado esa primera barrera, es probable que haya que ser un poco torero e intercambiar de vez en cuando los papeles de toro y torero entre ella y él; ya sabes, templar,mandar, dejar escurrir suavemente el capote, tratar de poner al toro en su terreno... pero nunca entrar a matar; aquí basta con hacer de vez en cuando "una buena faena". Y saber olvidarse de la felicidad total; basta con saber reconocer los pequeños cachitos y disfrutarlos...
¿A que sí?
Un abrazo,
Kurt